Emmanuel Macron hizo de los actos de conmemoración del 75º aniversario del desembarco de Normandía un alegato a favor del multilateralismo pidiendo a Donald Trump que sea fiel a los principios surgidos tras la segunda guerra mundial que dieron nacimiento a las Naciones Unidas, la OTAN y a la UE.

Bajo un cielo de un azul luminoso y ante más de 15.000 personas reunidas en el cementerio de Colleville-sur-Mer, donde yacen los 9.387 soldados norteamericanos muertos en la campaña de Normandía, el presidente francés y su homólogo norteamericano rindieron homenaje a los veteranos que participaron en la Operación Overlord, que condujo al fin de la segunda guerra mundial y liberó a Europa del régimen nazi.

Macron expresó su gratitud a Estados Unidos -«Francia no olvida a los luchadores que nos hicieron libres»- y acompañado de Trump condecoró con la Legión de Honor, la mayor distinción francesa, a cinco veteranos norteamericanos. En un contexto diplomático delicado y cuando las relaciones transatlánticas no pasan por su mejor momento, le ofreció a su homólogo renovar el compromiso nacido hace 75 años, esa «alianza de naciones libres» capaz de superar todos los desafíos. «América nunca ha sido más grande que cuando lucha por la libertad de los otros», dijo Macron, en una nueva versión del Make American great again que Trump ha convertido en un mantra. El gesto del norteamericano, que ha criticado a la OTAN como una organización obsoleta y se ha lanzado a las aguas procelosas del brexit apoyando su versión más dura, no mostraba entusiasmo por el mensaje del francés, pero la ceremonia se desarrolló en un ambiente de cordialidad y muy emotivo, en el magnífico acantilado desde el que se divisa la playa de Omaha que pisaron los 73.000 hombres del Ejército de EEUU, y con más de 500 veteranos de varias nacionalidades. «Señor presidente, renueve ese pacto uniendo a EEUU y Francia a la libertad. Yo estoy dispuesto. Francia está dispuesta a hacer vivir la amistad de estas dos naciones que tanto han aportado a la historia de los hombres», propuso en lo que bautizó como la promesa de Normandía.

Trump se centró en resaltar los logros de una generación de norteamericanos que lucharon para acabar con el dominio nazi y que «ofrecieron sus vidas muy lejos de su casa para escribir un capítulo de la historia de Francia». Según el presidente norteamericano, fueron aquellos soldados quienes «garantizaron la supervivencia de nuestra civilización» Su gesta fue ejemplo del «patriotismo» de un pueblo «libre y orgulloso», el mismo que venció el comunismo o envió el hombre a la luna. «Hoy, América es más fuerte que nunca antes», sentenció en tono preelectoral.

CITA CONSTRUCTIVA / En un encuentro bilateral posterior, celebrado en Caen, una de las ciudades normandas masacradas por la aviación aliada, los dos presidentes abordaron la agenda política internacional en un ambiente «constructivo» según fuentes del Elíseo. La jornada había empezado por la mañana en Ver-sur-Mer, donde Macron tuvo un delicado gesto con la premier británica, Theresa May, que hoy deja su cargo sumida en el caos de brexit. «Los dirigentes pasan, pero el trabajo que han hecho permanece. La fuerza de nuestro vínculo supera las vicisitudes del momento. Podemos estar orgullosos de los resultados obtenidos», le dijo Macron durante la colocación de la primera piedra del memorial británico que honrará a los muertos en Normandía.