El presidente francés, Emmanuel Macron, tuvo que ser fuertemente escoltado el pasado viernes por las fuerzas del orden a la salida de un teatro parisino debido a la protesta de un grupo de manifestantes contrarios a la reforma de las pensiones.

El jefe del Estado asistía junto a su esposa Brigitte a la representación de la obra La Mouche (La Mosca) en la sala Bouffes du Nord, en el distrito 10 de la capital, cuando una treintena de personas intentó entrar en el teatro. En un ambiente de gran tensión, la policía se vio obligada a pedir refuerzos para impedir que entraran en el recinto.

El jefe del Estado y su esposa abandonaron unos minutos sus asientos antes de volver a ocuparlos para terminar de ver el espectáculo e irse el lugar en coche sobre las 22 horas. Su salida se produjo en medio de los abucheos y los gritos de los manifestantes que coreaban Macron, dimisión! o todos juntos, huelga general.

Además, la Rotonde, el restaurante donde Macron celebró su pase en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en abril del 2017, fue incendiado de manera intencionada en la noche del mismo viernes.