El nuevo delito de 'venganza porno', ya ha llevado a los tribunales a 200 personas en Inglaterra y Gales. Los datos publicados en un informe oficial de la Fiscalía de la Corona, muestran una cifra record de agresiones contra las mujeres. Entre ellas figura el intercambio de fotos o filmaciones privadas, de carácter sexual, sin el consentimiento de la persona que aparece en las imágenes. Habitualmente es la antigua pareja quien distribuye el material con la idea de humillar o poner en evidencia a la víctima, en su mayoría mujeres o niñas.

La 'venganza porno' es delito desde abril del 2015, tras la insistencia de activistas y víctimas. La condena máxima para los culpables puede ser de dos años de cárcel. Hasta finales de marzo del 2016, un total de 206 personas han sido procesadas por esta causa. Escocia e Irlanda del Norte han adoptado similar legislación posteriormente.

La Fiscalía también advierte de “la creciente tendencia” de ofensas cometidas a través de las redes sociales. Los procesamientos por “obscenidad” o posesión de imágenes porno de carácter extremo aumentó un 20% en el periodo entre la primavera del 2015/2016. "Hay una tendencia creciente de delinquir a través de las redes sociales", señala Alison Saunders, director del departamento de Procesamientos Públicos de la Fiscalía. "También hemos constatado que los acusados en casos de control o coerción emplean métodos como el seguimiento de la víctima con los GPS , la supervisión de los móviles y los mensajes por correo electrónico. Está aumentando el uso de internet, las redes sociales y otras formas de tecnología, para controlar y amenazar a las personas".

Los datos están incluidos en el informe anual de Violencia Contra Mujeres y Niñas que elabora la Fiscalía, en el que también se constata un número récord de denuncias por violación, violencia doméstica, ofensas sexuales y abusos de niños. Los datos incluyen también a hombres y chicos. De acuerdo con Saunders el aumento de denuncias se debe a que “hoy es más fácil procesar y condenar” a los culpables.

Las organizaciones contra la violencia de género advierten sin embargo que la mayoría de las víctimas de este tipo de delitos siguen sin denunciarlos a la policía.