Nueva tragedia áerea. Al menos 41 personas han muerto al aterrizar su avión en un aeropuerto de Moscú, ya que la nave se encontraba envuelto en llamas. Según informan medios rusos citando a fuentes de la compañía, la causa del incendio podría haber sido un rayo.

El avión de pasajeros Superjet-100 cubría la ruta entre Moscú y Murmansk y ha sufrido un incendio en los dos motores en pleno vuelo. En un primer intento de aterrizaje de emergencia, la aeronave de la compañía Aeroflot no lo ha conseguido y ha sido con el segundo intento cuando el avión ha podido aterrizar aunque la parte trasero del aparato ya estaba devorada por el fuego.

En el vuelo había 73 pasajeros y seis miembros de la tripulación. El avión había despegado minutos antes de Sheremétievo en dirección al noroeste de Rusia, en Murmansk. Aún se desconocen las causas exactas del accidente, aunque los miembros de la tripulación se trataría de un rayo que había incendiado parte del fuselaje. Otras fuentes aseguran que pudo deberse a un fallo en el sistema eléctrico del aparato. La tragedia ocurrió sobre las 18.40 (hora local, las 17.40 en España).

Tras 40 minutos después del despegue, el avión solicitó un aterrizaje de emergencia y emitió la señal de emergencia por incendio a bordo. Sin esperar a recibir respuesta por parte de las autoridades del aeropuerto, la aeronave se dispuso a aterrizar.