Una serie de ataques reivindicados por el Estado Islámico (EI) causaron ayer la muerte de al menos 150 personas en la ciudad de Al Sueida y sus alrededores, en el sur de Siria. Cuatro suicidas activaron sus cinturones explosivos cerca del mercado de la localidad, a la vez que detonaron varios artefactos en diferentes lugares de la ciudad al amanecer.

Según la televisión siria, uno de los suicidas se lanzó hacia la zona del mercado en motocicleta al tiempo que se hacía explosionar. Entre las víctimas mortales hay tanto civiles como combatientes. Estos últimos perdieron la vida en los combates entre las fuerzas gubernamentales y el EI, según informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), y en los ataques que milicianos del EI llevaron a cabo en tres localidades del área de Al Sueida.

Al menos 28 de los fallecidos son miembros de las fuerzas leales al presidente sirio, Bashar al Asad. También hay decenas de heridos, algunos de ellos en estado muy grave, por lo que el balance de muertos podría aumentar en los próximos días. En las filas del EI, el número de muertos ascendía a 16, contando también a los cuatro suicidas.

BOMBARDEOS AÉREOS / El Observatorio Sirio de Derechos Humanos comunicó que se están produciendo violentos enfrentamientos al norte de Al Sueida, tras los ataques del Estado Islámico a varias poblaciones y después de que los milicianos radicales se hicieran con el control de las localidades de Al Matuna, Duma, Al Shibki, Al Shurahi y Tel al Basir. En su contrataque, las tropas de Damasco están intentando recuperar el dominio de esos pueblos y sus aviones bombardean la zona. La provincia de Al Sueida había quedado, hasta ahora, bastante al margen de los horrores de la guerra desde que empezó el conflicto en el 2011. Pero, en las últimas semanas, el Gobierno sirio y su principal aliado, Rusia, han lanzado una ofensiva para barrer a los rebeldes de las zonas que controlaban en el suroeste de Siria.

Las fuerzas de Damasco y Moscú han recuperado pueblos en las provincias de Deraa y Quneitra, esta última limítrofe con Israel, en concreto en el área de los Altos del Golán.

En este contexto, en Pakistán, al menos 21 personas murieron ayer y otras 20 resultaron heridas en un atentado suicida al paso de un furgón policial cerca de un colegio electoral en la ciudad de Quetta, en el primer ataque que tiene lugar durante las elecciones generales que se están celebrando en el país.

Pakistán celebraba ayer unos comicios que se disputan el exjugador de críquet Imran Khan y Shahbaz Sharif, hermano del encarcelado Nawaz Sharif, y que han estado marcados por las interferencias del Ejército.

Estas elecciones son las segundas en la historia del país en las que un Gobierno acaba un mandato por completo y da paso a otro Ejecutivo, después de haber sido gobernado por dictaduras militares durante cerca de la mitad de los 71 años de historia del país.