El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha evitado valorar este miércoles los mensajes de su homólogo de Estados Unidos, Donald Trump, sobre la construcción de un muro en la frontera entre los dos países, argumentando que se trata de una situación de "política interna".

"No vamos a responder ante planteamientos que se generan por la situación interna en Estados Unidos", ha declarado López Obrador en su rueda de prensa diaria, después de que Trump lanzase un nuevo llamamiento para conseguir fondos con los que sufragar la construcción del polémico muro.

POSIBLE EMERGENCIA NACIONAL

El presidente estadounidense incluso baraja la posibilidad de declarar una emergencia nacional para saltarse al Congreso y reforzar la seguridad fronteriza, una de sus grandes promesas durante la campaña electoral.

López Obrador ha abogado por "resolver el problema de la migración atendiendo las causas". "Estamos persuadiendo, convenciendo al Gobierno de Estados Unidos de que lo mejor es el desarrollo de los países de Centroamérica, de México", ha explicado el dirigente, que aspira a que "la migración se convierta en optativa, no en obligatoria".

Sobre las afirmaciones de Trump de que México terminará pagando el muro por los beneficios obtenidos por Estados Unidos en el nuevo acuerdo comercial con México y Canadá, el izquierdista se limitó a decir: "Es su punto de vista".

El líder de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) también confirmó que se está reforzando la seguridad en la frontera sur del país ante la posible llegada de una nueva caravana de centroamericanos a mediados de enero.

"Lo que queremos es que los migrantes centroamericanos que llegan a nuestro país, que transitan por territorio nacional, tengan protección y se garanticen los derechos humanos. Y al mismo tiempo, que se pueda saber quiénes son y de dónde vienen para darles más seguridad", apuntó.

Dijo que se desplegarán más elementos hasta donde sea "posible" porque la frontera sur es "extensa y complicada".

CONFRONTACIÓN POLÍTICA

El mandatario de México ha apuntado, además, que hay una "confrontación política" en Estados Unidos propia de contextos electorales y la ha atribuido a los "periodos muy cortos" entre los distintos comicios.

En este sentido, ha afirmado que el debate político comienza "casi al entrar" el nuevo presidente en la Casa Blanca por tratarse de periodos de cuatro años con posibilidad de reelección. En México, el mandato del jefe del Estado consiste en un único periodo de seis años.

REACCIÓN DE LA PRENSA

La prensa mexicana, en general, destacó que el discurso de Trump fue una vez más "una reiteración de mentidas y de falacias, algo que ya había repetido en la campañá electoral", destacaba el periódico 'El Universal'. Este rotativo, además, incidía especialmente en la reacción de los demócratas de EEUU en respuesta al discurso del presidente, calificando de "mentiras" muchas de las afirmaciones del controvertido magnate.

Igualmente, 'El Sol de México' destacaba la "desesperación de Trump" por tratar de levantar el muro argumentando falsedades. E igualmente destacaba la respuesta demócrata con Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara Baja, a la cabeza: "El presidente debe dejar de mantener como rehén al pueblo estadounidense, dejar de fabricar una crisis y debe volver a abrir la administración", destacó la veterana política.