Solo entre 2014 y 2018 se cometieron 55.882 delitos contra menores, algunos de ellos muy graves como asesinatos, mutilaciones, abusos sexuales y secuestros, en zonas salpicadas por conflictos armados en África, reveló este viernes la oenegé Save The Children. Somalia figura como el país donde se produjeron más violaciones de este tipo -sobre todo en forma de reclutamiento forzoso, secuestro, mutilación o asesinato- seguido por Sudán del Sur y Nigeria. Además de estos tres países, los datos también incluyen a la República Democrática del Congo (RDC), Malí, Sudán y la República Centroafricana.

Desde 2014 y hasta 2018, al menos 11.369 niños y niñas fueron asesinados o mutilados en conflicto y más de 24.000 fueron reclutados por grupos armados, según datos recopilados por Save The Children basados en informes pormenorizados de la ONU. Además, otros 4.678 menores, sobre todo niñas, fueron abusadas sexualmente, la mitad de ellas en Somalia y la República Democrática del Congo (RDC); país en el que la violación es usada como arma de guerra por decenas de milicias.

Y en total, en estos ochos países, grupos armados atacaron a más de 3.060 escuelas, la mayoría, en el año 2015 y el norte de Nigeria, donde el grupo yihadista Boko Haram continúa atemorizando a la población civil. Y asimismo, tuvieron lugar alrededor de 500 ataques verificados contra hospitales -lo que de acuerdo con el derecho internacional constituye un crimen de guerra- y casi 9.300 niños fueron secuestrados.

Erradicación de conflictos

"En Malí, la situación de los niños es realmente crítica. Vemos niños asesinados, violados; algunos de ellos han visto cómo sus hermanos y padres morían delante de ellos", recuerda en el texto Mariam, de 18 años y miembro del Consejo asesor para niños y gente joven de Malí.

Save The Children publica estos datos dos días antes de que los jefes de Estado y Gobierno de África se reúnan el 9 y 10 de febrero en la capital etíope de Adís Abeba con motivo de la 33 Asamblea ordinaria de la Unión Africana (UA).

Un encuentro centrado este año en la erradicación de los conflictos y la evaluación del programa "Silenciemos las armas", el cual pretendía acabar con la violencia en el continente para 2020. "Los Estados miembros de la UA y las partes en conflicto deben encontrar formas consensuadas, significativas y sostenibles de poner fin a las guerras y proteger a los niños de cualquier forma de violencia, abuso y explotación", urge la representante de Save The Children ante la organización panafricana, Doris Mpoumou.