La Policía Federal de Brasil dijo que "no es posible" autorizar la salida temporal del centro de reclusión en el que está al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, para que acuda al entierro de su hermano mayor quien falleció el martes pasado, y atribuyó la decisión a cuestiones logísticas.

Los abogados de Lula presentaron una solicitud ante un juzgado de Curitiba, en el sur de Brasil, para que el expresidente pudiera viajar a la localidad de Sao Bernardo do Campo, en Sao Paulo, para dar el último adiós a su hermano mayor, Genival Inácio da Silva, conocido como Vavá y quien padecía de un tipo raro de cáncer.

La magistrada encargada del caso, Carolina Lebbos, afirmó sin embargo, que según la legislación brasileña "el permiso de salida será concedido por el director del establecimiento donde se encuentra el preso". En este caso, se trata del superintendente regional de la Policía Federal en el estado de Paraná, Luciano Flores de Lima, quien afirmó que no sería posible "autorizar o hacer viable" la comparecencia de Lula al velatorio de su hermano por cuestiones de logística.

FALTA DE HELICÓPTEROS

En su pronunciamiento, que tiene carácter administrativo y fue remitido a la magistrada, el superintendente destacó la "falta de transporte aéreo en tiempo hábil para la llegada del expresidente Lula antes del final de los ritos post mortem de su hermano".

Según el director, los helicópteros "que en el momento no están en reparación están siendo utilizados para apoyo a los rescates de las víctimas" de la tragedia minera en Brumadinho (sureste de Brasil).

Asimismo, Flores de Lima apuntó la "ausencia de policías disponibles" para "garantizar el orden público y la incolumidad tanto del expresidente como de los policías y personas a su alrededor" y las "perturbaciones a la tranquilidad de la ceremonia fúnebre" como factores adicionales a la imposibilidad de un desplazamiento de Lula a Sao Bernardo do Campo.

PREVIENEN MANIFESTACIONES DE SEGUIDORES

El director también hizo menciones a la "gran posibilidad" de que se produzcan manifestaciones de partidarios del expresidente (2003-2010), quien a su juicio continúa ejerciendo un "fuerte liderazgo" dentro del Partido de los Trabajadores (PT) y "entre simpatizantes".

"Es importante que Lula sea mantenido a larga distancia de aglomeraciones, ya que este hecho puede desencadenar crisis imprevisibles", señaló Flores de Lima. Pese a la manifestación administrativa contraria por parte de la Policía Federal, la jueza responsable de la ejecución penal de la acción, Carolina Lebbos, aún puede manifestarse sobre la petición.

En una nota publicada minutos después de la resolución, el Partido de los Trabajadores (PT) criticó el fallo y calificó la decisión como "absurda".