Lejos de amedrentarse, la oposición en Rusia pretende seguir manteniendo la presión sobre el Gobierno, tras el inesperado éxito de las movilizaciones contra la corrupción que tuvieron lugar a finales de marzo en un centenar de ciudades de todo el país, que lograron congregar a decenas de miles de personas.

Nada más salir de prisión, donde ha cumplido una pena de 15 días, el bloguero anticorrupción y líder del movimiento, Alekséi Navalni, convocó a finales de la semana pasada nuevas acciones de protesta para el próximo 12 de junio, día de la fiesta nacional de Rusia, en el que el país conmemora la proclamación de soberanía realizada en 1990 por el Parlamento ruso integrado en la Unión Soviética.

"El 12 de junio, en el día de Rusia, convoco a los patriotas del país, independientemente de sus ideas políticas, a unirse a las manifestaciones anticorrupción con banderas rusas y una demanda renovada de respuestas a nuestras preguntas", ha invitado Navalni en un mensaje de audio difundido en su blog.

DIFÍCIL REPRESIÓN

En esta ocasión, la represión de las manifestaciones opositoras por parte del poder político será más complicada de materializarse al tratarse de una jornada festiva, en la que se espera que una multitud de ciudadanos salgan a la calle precisamente portando banderas para celebrar la efeméride, tal y como demanda Navalni a sus seguidores.

"Hay que mostrar, de forma inequívoca y sin compromiso alguno que no, que no retiramos nuestras exigencias con respecto a la corrupción", ha instado el opositor.

Solo en Moscú, un millar de personas fueron detenidas por las fuerzas de seguridad el pasado 26 de marzo. La mayoría de los congregados eran jóvenes de entre 16 y 25 años, en edad escolar o universitaria, que se informan por internet y que solo han vivido bajo la presidencia del presidente Vladímir Putin.

"La corrupción es la causa de la pobreza, de los bajos salarios, la causa del terrible estado de la economía", ha continuado.

APOYO DE JODORKOVSKI

Navalni, además, ha recibido este martes, cara a las elecciones presidenciales previstas el año que viene, el respaldo de Mijaíl Jodorkovski, ex empresario petrolero crítico con Putin que pasó un decenio en prisión acusado de delitos fiscales, al tiempo que vio cómo la justicia desmantelaba su empresa, la petrolera Yukos, entonces la más importante del país.

"Hoy en día no existen en el plano legal otras estructuras más allá que Rusia Abierta" (impulsada por el propio ex magnate represaliado) "y el Fondo de Lucha contra la Corrupción", creado por Navalni, "que proponen una política diferente a la que proponen las autoridades", ha declarado Jodorkovski en una conferencia pronunciada en Tallín (Estonia).

CONDENA EN SUSPENSO

Navalni intentará concurrir a los comicios presidenciales del año que viene, aunque una reciente condena de cinco años en suspenso con inhabilitación política incluida amenaza con dar al traste sus aspiraciones políticas.

Jodorkovski, por su parte, vive en el exilio, pero a través de Rusia Abierta respalda política y financieramente a candidatos opositores ajenos a la élite que gobierna el país y que participan, aunque conmuchas dificultades, en las diferentes citas electorales de Rusia.