El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y su esposa, Rosario Murillo, han anunciado que serán compañeros de candidatura en los próximos comicios del 6 de noviembre, en los que no participará el principal bloque opositor. El mandatario se registró el martes ante las autoridades electorales en busca de su cuarto mandato y tercero consecutivo junto con la influyente primera dama como aspirante a vicepresidenta.

"Se hablaba de quién iba a asumir la vicepresidencia para seguir con el buen Gobierno de este país. Tenía que ser una mujer y quién mejor que la compañera Rosario Murillo, que ha realizado una labor con mucha eficiencia, disciplina, dedicación y sin horario", dijo el líder sandinista. Ortega agregó que su mujer aspira a la vicepresidencia "en representación de las mujeres nicaragüenses".

DESTITUIDOS LOS DISPUTADOS OPOSITORES

La inscripción de la fórmula presidencial de la "Alianza Unida, Nicaragua Triunfa", encabezada por el gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) y que incluye a pequeños partidos, se da cuatro días después de que la Junta Directiva del Parlamento, controlada por el oficialismo, ratificara una resolución del Poder Electoral de destituir a la mayoría de diputados opositores. Los legisladores expulsados pertenecen a la Coalición Nacional por la Democracia que desde 2015 protesta en las calles todos los miércoles para exigir elecciones libres, transparentes, incluyentes y con presencia de observadores.

La nominación de Murillo recibió las críticas inmediatas de se quienes consideran que Ortega no solo quiere instaurar un régimen de partido único, sino una nueva dinastía 37 años después de que fuera derrocada otra, la de la familia Somoza (1937-1979). Murillo apoyó a Ortega cuando Zoilamérica Narváez, hija de la primera dama e hijastra del mandatario, acusó al líder sandinista en marzo de 1998 ante un tribunal de Managua de someterla a abusos sexuales y diversas agresiones físicas y psicológicas desde 1979, un caso que fue archivado por la Justicia.