Solo una hora después de presentar los artículos de impeachment contra Donald Trump, los demócratas dieron ayer al presidente de Estados Unidos lo que puede ser una de sus mayores victorias legislativas: el respaldo para el USMCA, un renovado tratado de libre comercio con México y Canadá que sustituirá al Nafta y con el que el mandatario cumple una de sus promesas. El anuncio de ese apoyo demócrata, que permitirá aprobar en el Congreso un texto revisado que ayer firmaban en Ciudad de México representantes de los tres países, llegó de boca de Nancy Pelosi. Se produce después de que al texto pactado hace más de un año se le hayan hecho cambios que buscaban los demócratas y exigían los sindicatos, como el aumento de protecciones laborales y medioambientales, reglas más estrictas para vigilar la aplicación de las normas o medidas sobre precios de medicamentos.
La interpretación partidista era inevitable. El vicepresidente Mike Pence dijo que los demócratas habían «claudicado». Los progresistas, por su parte, pueden presentarlo ante los votantes como muestra de la capacidad de negociar. El mayor rédito político lo sacará Trump, que ya presume del «mejor acuerdo comercial alcanzado nunca por EEUU».
