El pacto verde y la lucha contra el cambio climático seguirán siendo la gran prioridad. Bruselas propone aumentar el objetivo de reducción de emisiones de CO2 para el 2030, del 40% actual al 55%, con vistas a lograr la neutralidad climática en el 2050. Para conseguirlo revisará la legislación sobre clima y energía, y propone destinar el 37% del fondo de recuperación a proyectos vinculados con el pacto verde y que el 30% de la financiación proceda de la emisión de bonos verdes.