Los continuos desembarcos de personas que cruzan el mar Mediterráneo, y en menor medida las llegadas por vía terrestre, están cambiando el rostro de la inmigración en Italia y, por extensión, en Europa. Tanto que el número de peticiones de asilo en el país ya ha superado las de solicitudes de residencia por motivos laborales, según un reciente estudio del Instituto de Estadísticas de Italia (ISTAT), divulgado este miércoles por la prensa italiana.

En concreto, según el ISTAT, el 3,7% del total de los nuevos permisos de residencia en 2007 fue otorgado en Italia por motivos de asilo político o protección humanitaria, una cifra que saltó al 28,2% en el 2015. Mientras que, en ese mismo período, se pasó del 56,1% al 9,1% de los permisos concedidos por razones laborales.

En particular, “en los dos últimos años, los flujos migratorios llegaron a una dimensión nunca antes alcanzada en comparación con los anteriores nueve años”, agregó la institución, al puntualizar que a comienzos del 2016 en Italia residían 155.177 personas con estatus de refugiado o de protección humanitaria.

Además de ello, se observa que en el sur del país y en las islas el número de refugiados ya representa hasta el 20% de la población no europea. En cambio, los porcentajes más bajos se encuentran en las provincias de Módena y Brescia, en el norte de Italia. De igual forma, el ISTAT puntualizó que solo el 49,3% de las personas asiladas en el 2012 siguen en la actualidad viviendo en territorio italiano, lo que sugiere que las residencias en Italia son solo temporales.

EMBAJADA EN TRÍPOLI

Este análisis arroja nueva información sobre el fenómeno migratorio, en unos momentos en que el Gobierno italiano se está planteando aumentar las expulsiones y cerrar la ruta de Libia. Por esta razón, a comienzos de esta semana, Italia reabrió su embajada en Libia y el ministro de Interior, Marco Minniti, viajó a Trípoli, con el objetivo de alcanzar un acuerdo con el Gobierno libio de Falez Mustafa Al Serraj.

“La misión en Libia ha sido una ocasión para retomar la colaboración entre los dos países, en particular con referencia al tema migratorio”, comunicó el Ministerio de Interior tras el viaje.