Hillary Clinton se puede convertir en la primera mujer en asumir la presidencia de Estados Unidos, una posibilidad que ha hecho que muchas votantes estadounidenses se hayan sumado a la campaña de Twiter #WearWhiteToVote (nosotras vestimos de blanco para votar), en homenaje al movimientro sufragista de EEUU, que tras décadas de dura lucha logró que las mujeres pudieron votar por primera vez en otoño de 1920. El blanco identificaba al movimiento y las militantes vestían todas de ese color.

Otro grupo, que empezó con medio centenar de seguidoras, ha popularizado la vestimenta tradicional y fetiche de Clinton, el traje pantalón. Nacido en Facebook como "Pantsuit Nation" hoy tiene en su cuenta de Twitter (#pantsuitpower) más de dos millones de seguidoras que se han propuesto ir a votar hoy enfundadas en esta prenda. En la actuación de apoyo que hizo en un mitin de campaña a Cinton, la pop-star Beyonce saltó al escenario con este tipo de vestimenta, así como las bailarinas que le acompañaron.

Dos iniciativas nacidas en las redes sociales que han tenido gran impacto. En todo caso, el de las mujeres de blanco está llena de gran simbolismo, porque, además, fue bajo el mandato de un presidente demócrata, Woodrow Wilson, cuando las mujeres estadounidenses pudieron votar por primera vez.

En EEUU el movimiento de las sufragistas nació a mediados del siglo XIX. No fue hasta después de la primera guerra mundial, momento en que las mujeres estadounidenses tuvieron un papel muy activo en la retaguardia, cuando la reinvindicación tomó forma y fue asumida por Wilson. "¿Deberíamos admitir a las mujeres solo como un colectivo de sufrimiento o sacrificio o dotarle de derechos?, se preguntó en septiembre de 1918.

"En honor a nuestras antepasadas que lucharon, sufrieron e incluso murieron para lograr el voto para las mujeres", ha tuiteado hoy Luise Marley que ha acudido de blanco al colegio electoral. "Voy a votar vestida de blanco y por la primera mujer que será presidente de Estados Unidos", ha escrito, por su lado, Maggie.

ENMIENDA CONSTITUCIONAL

Lideresas como Alice Paul, que dirigió durante un tiempo elPartido Nacional de Mujeres, lucharon para introducir una enmienda en la Constitución que permitiera a las mujeres poder votar. Lo consiguieron poco a poco, estado a estado. Los primeros en dar luz verde fueron Ilinois, Wisconsin y Michigan. Luego se fueron uniendo otros hasta alcanzar la cifra de 36, los necesarios para poder ratificar la enmienda, que sucesió el 26 de agosto de 1920.

“El derecho de los ciudadanos de Estados Unidos al voto no será negado ni limitado por los Estados Unidos o por cualquier estado por razón del sexo”, fue parte del texto de la enmienda. Fue, sin duda, una gran victoria, pero insuficiente. La ley afectaba únicamente a las mujeres blancas, no a las negras.

Un hecho que no ha pasado desapercibido en la campala '#WearWhiteToVot'. "Las mujeres negras no necesitamos participar porque las sufragistas nunca estuvieron por nuestros derechos", ha tuiteado Jouelzy. "Las mujeres negras en EEUU no pudieron votar hasta 1965, no 1920. Todas las mujeres no somos blancas", ha escrito, en tono reivindicativo, Kirsten West Savali.