La situación política en Bolivia es tensa después de que, hace dos semanas, Evo Morales renunciara a la presidencia por un supuesto fraude que señaló la Organización de Estados Americanos (OEA) que lo obligó a dejar el poder, y aceptar la oferta de México para vivir en dicho país ante la no seguridad que afrontaba su vida.

Hace unos días, en la Cámara de Senadores fue presentada una ley por Sonia Chiri, senadora indígena quechua del MAS, en el que solicita prohibir "aprehensiones y procesos judiciales" contra Morales, funcionarios, líderes sociales, sindicales y otros nombrados por su Gobierno, pues además de exponerlos, también se hace con sus familias.

Debido a ello, la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, comentó este sábado que no esta a favor de promulgar dicha ley y hará todo lo posible para que no se haga así, ya que aseguró que de su parte y el gabinete que lo compone "no perseguirá a ningún dirigente político, sindical o cívico; aunque todo aquel que ha cometido delitos y se ha burlado de la ley y ha cometido abusos, no tendrá amnistía de ningún tipo".

"Quiero denunciar ante el país que parlamentarios del Movimiento al Socialismo tienen la intención de aprobar una ley para favorecer a quienes han cometido delitos y ahora pretenden obtener impunidad", mencionó a través de un comunicado.