Los progresistas del Partido Democrático (PD) y los indignados del Movimiento 5 Estrellas (M5S), sumados a los disidentes progresistas de Libres e Iguales (LEU), darían aritméticamente 168 escaños, sobre una mayoría necesaria de 158 en el Senado, y sumarían 377 en el Congreso respecto a una mayoría requerida de 316. Sin embargo, se trata de una combinación irrealizable. «Nuestros votos no los tendréis nunca», dijo Matteo Renzi durante la campaña electoral y ayer, mientras anunciaba su dimisión y perfilaba el recorrido que seguirá su partido para elegir a otro secretario, lo repitió de nuevo por si había alguna duda: «Nunca haremos un gobierno con las fuerzas antisistema». Y sin el PD, la posibilidad no es viable, por falta de mayoría entre el M5S y Libres e Iguales. Sin embargo, una parte del PD sigue presionando para «ver las cartas» del M5S antes de cerrase en banda.