El jefe del Gobierno italiano, Matteo Renzi, ha indicado este jueves que rehusará encabezar un Gobierno técnico, encargado de preparar nuevas elecciones, en caso de victoria del 'no' en el referéndum constitucional del próximo 4 de diciembre.

"Yo no puedo ser quien se ponga de acuerdo con los otros partidos para hacer un Gobierno técnico, a cargo de un solo objetivo", en este caso, la reforma electoral antes de unas eventuales elecciones anticipadas, ha declarado este jueves en la radio italiana RTL 102,5.

Los italianos votarán el 4 de diciembre para aprobar o no una reforma de la Constitución que pretende simplificar los procesos legislativos y dar más estabilidad política en un país que ha conocido 60 gobiernos desde 1946.

Esta consulta, sin embargo, se ha transformado en un voto de confianza hacia el jefe de Gobierno, que llegó al poder a principios del 2014.

Según un sondeo publicado este jueves por el diario Il Sole24Ore, el 'no' obtendría el 34% de los votos, contra el 29% a favor del 'sí', aunque el 37% de los electores se confesan aún indecisos o partidarios de la abstención.

GOBIERNO TÉCNICO

En caso de victoria del 'no', Renzi debería dimitir, según la opinión de varios expertos políticos. "No está claro cómo podría no hacerlo", ha estimado recientemente ante la prensa extranjera Giovanni Orsina, profesor de ciencias políticas en Roma.

Pero él también podría encargar al presidente italiano, Sergio Mattarella, que encabezara un Gobierno técnico -como Italia ha vivido en precedentes crisis políticas- encargado de reformar la ley electoral antes de las elecciones anticipadas.

Esta posible solución es la que él mismo ha rechazado este jueves, considerando que no está para participar "en los pequeños juegos de la vieja política". "No estoy dispuesto a aferrarme a la silla (...) Yo estoy aquí para cambiar las cosas", ha insistido.