Pequeños grupos de huelguistas protagonizaron ayer acciones de bloqueo en el metro y en los ferrocarriles en París para protestar contra la reforma de las pensiones del Gobierno del presidente francés, Emmanuel Macron.

Los manifestantes, algunos con bengalas, interrumpieron durante una veintena de minutos la línea 1 a su paso por la Estación de Lyon, según una portavoz de la entidad del transporte metropolitano de París RATP.

La 1 y la 16, al ser automáticas, son las dos únicas líneas del metro de la capital que han funcionado normalmente en las 19 jornadas consecutivas de paro desde que se inició el movimiento el 5 de diciembre.

En superficie, varias personas bajaron a las vías del tren en la Estación de Lyon, lo que según la compañía ferroviaria SNCF puso en peligro sus vidas.

La ministra de Transportes, Elisabeth Borne, condenó esas actuaciones y en su cuenta de Twitter señaló que «el libre ejercicio del derecho de huelga no da derecho a invadir, a bloquear, a intimidar a los viajeros».

Yves Veyrier, secretario general de Fuerza Obrera (FO), quiso quitar importancia a esas protestas e insistió, en declaraciones al canal BFMTV, en que los sindicatos organizadores de las protesta han mostrado su capacidad para manifestaciones multitudinarias pacíficas, pero que el problema es que «no se nos escucha». Veyrier se mostró escéptico sobre el calendario de negociaciones que debe anunciar el Gobierno para enero porque opinó que de todas formas el Consejo de Ministros aprobará el proyecto de ley de la reforma el día 22 y da por hecho que el texto ya está escrito.

NEGOCIACIONES / El Ejecutivo anunció que el 7 de enero recibirá a los sindicatos para negociar algunos puntos de la reforma, y dos días después está convocada una nueva jornada de manifestaciones.

La huelga seguirá hoy en los ferrocarriles con solo un 40 % de los trenes de alta velocidad (TGV) y de los regionales en circulación, un 20 % de los cercanías en París y las líneas internacionales afectadas en buena medida, con sólo la mitad de los convoyes habituales entre España y Francia, indicó la SNCF en un comunicado.

En el metro funcionarán normalmente las dos líneas automáticas del metro, pero otras ocho lo harán con muchos menos trenes y únicamente durante las horas punta. Thierry Defresne, delegado de la Confederación General del Trabajo (CGT) en la compañía petrolera Total, afirmó que se van a endurecer los paros en las refinerías francesas, lo que disminuirá su producción en un 20%, lo que generará escasez.