Silvio Berlusconi ha reclamado que el encargo de formar Gobierno en Italia recaiga sobre la coalición de derecha y ha anunciado que apoyará la formación de un Ejecutivo encabezado por Matteo Salvini, líder de la Liga. El exprimer ministro lo ha asegurado en una entrevista este miércoles en el diario italiano Corriere della Sera. Pero también el Movimiento Cinco Estrellas (M5S), que se presentó en solitario a las elecciones, reivindica el derecho a formar el próximo Gobierno italiano.

Tanto la Liga como el M5S fueron los dos vencedores de la jornada electoral del pasado domingo, que dió lugar a una Parlamento italiano sin mayoría.

Los indignados del M5S consideran, y diplomáticamente reivindican al Presidente de la República, Sergio Mattarella, que, dado que ningún partido o coalición ha obtenido una mayoría para gobernar y ellos son el partido más votado (32,7%), tienen derecho a una primera opción.

Por su parte, Berlusconi alega que la coalición de centroderecha ha resultado la más votada (35,4%), aunque tampoco cuenta con una mayoría para gobernar. «Estoy convencido de que Italia necesita un Gobierno lo más pronto posible y éste no puede sino ser sino la expresión de la coalición que ha prevalecido», ha declarado en la entrevista al Corriere della Sera. Berlusconi ha añadido que «apoyará lealmente la tentativa de Matteo Salvini» -líder de la Liga-- de formar un Gobierno, después de que los resultados de las elecciones marcaran por primera vez, entre los conservadores, un adelanto de la Liga (17,4%) respecto a Forza Italia (14%).

«Respetando nuestros acuerdos, apoyaremos de forma leal los intentos de Salvini de formar Gobierno», ha afirmado Berlusconi en la entrevista. «Estoy aquí para apoyarle, para garantizar la solidez de la coalición y para mantener nuestros compromisos con los votantes», ha añadido. La actual situación italiana ha sido comparada a una partida de ajedrez, aunque parafraseando unas palabras de Nicolás Maquiavelo, se podría decir que todos están a la espera de que alguno de los protagonistas se saque de la manga el compromesso, el pacto o los pactos necesarios para poder formar un Gobierno.

POCAS OPCIONES / Las opciones sobre la mesa no son muchas: o el M5S recibe un cierto apoyo parlamentario (no una alianza) del progresista Partido Demócrata (PD) o lo recibe de la derecha, que cuenta como líder al antieuropeísta y xenófobo Salvini. La segunda posibilidad es más fácil que la primera, pero tanto el jefe del Estado como las instancias europeas e internacionales presionan para la primera.

Por esta razón entre los progresistas se ha abierto un especie de desafío final entre quienes proponen «ayudar» al M5S y quienes se oponen rotundamente. Matteo Renzi, secretario general del PD, se opone y anunció su dimisión (aunque no se hará efectiva hasta la elección de su sucesor).

«Nunca con los extremistas», dijo. «No, no somos compatibles ni con los indignados ni con los conservadores», ha declarado Andrea Orlando, actual ministro de Justícia en funciones, según el cual el 90% del PD también está en contra de apoyar al M5S.