El Ministerio Público Militar denunció el viernes a los doce soldados que el pasado 7 de abril en una operación fallida contra ladrones dispararon 257 veces contra un coche en el que viajaba una familia y en el que murieron el músico que conducía y un basurero que pasaba por la calle.

Los soldados, que están en una prisión del Ejército, deberán ahora responder ante la Justicia militar por doble homicidio calificado, tentativa de homicidio y omisión de socorro a los heridos.

El suceso, que ha causado una gran conmoción en Brasil, ocurrió el domingo 7 de abril cuando soldados del Ejército dispararon contra un vehículo y mataron a su conductor, Evaldo Rosa, de 51 años, al confundirlo con un coche de delincuentes.

Viajaban con él su esposa, su hijo de 7 años, su suegro y una amiga de la familia, que consiguieron sobrevivir al ataque.

El recolector de basura Luciano Macedo, que intentó ayudar a los sobrevivientes, fue herido de gravedad por los disparos y murió dos semanas después en un hospital de Río de Janeiro, mientras que el suegro de Rosa, Sergio Gonçalves de Araujo, recibió alta en la misma semana del incidente.

El grupo militar admitió haber disparado contra el coche alegando que se trataba de un vehículo con características similares a uno en el que supuestos ladrones se movilizaban ese día por el barrio Guadalupe, en la zona norte de la ciudad.

En principio se había dicho que los militaron dispararon ochenta tiros contra la familia, pero un laudo del Ministerio Público Militar apuntó que fueron 257 disparos de fusil y pistolas.