Al menos 125 personas podrían haber muerto como consecuencia de un ataque de los talibanes en una base de la principal agencia de seguridad en Afganistán, el Directorio Nacional de Seguridad (NDS, por sus siglas en inglés), recientemente construida en la provincia central de Maidan Wardak. «Tenemos la información de que 126 personas han muerto en la explosión que se ha registrado dentro del centro de entranamiento militar», informó una fuente anónima del Ministerio de Defensa en Kabul. Pero no hubo confirmación oficial.

Al parecer, un vehículo cargado de explosivos consiguió acceder al recinto militar. Fuentes del Ministerio de Defensa señalaron que el coche bomba era un Humvee, un blindado estadounidense capturado a las fuerzas afganas. La misma fuente explicó que después de la explosión, dos atacantes entraron también en el recinto y comenzaron a disparar hasta que fueron abatidos por los soldados.

El puesto militar, con capacidad para unos 150 miembros de la agencia de inteligencia, se encuentra a menos de dos kilómetros de la capital provincial, Maidan Shahar. El portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, reivindicó la autoría del atentado en un breve comunicado, antes de afirmar que «varios soldados y oficiales de las fuerzas especiales fueron asesinados» en el tiroteo. Mujahid cifró en 190 el número de víctimas mortales registradas en el complejo militar.

PUERTA DE PASO / La provincia de Maidan Wardak, situada al sur de Kabul, comparte frontera con las inestables Ghazni (sur) y Logar (este) y tiene una importancia estratégica para los insurgentes y para el Gobierno afgano, ya que sirve como puerta de paso hacia el territorio del sur y el centro de este país.

Desde el fin de la misión de combate de la OTAN, en enero del 2015, el Gobierno afgano ha ido perdiendo terreno ante la ofensiva de los talibanes y en la actualidad apenas controla un 56% del país.