Los talibanes lanzaron este lunes un ataque desde cuatro puntos para tomar la ciudad de Kunduz y mantienen combates con las tropas afganas un año después de que controlaran durante unos días esa urbe del norte de Afganistán, informaron fuentes oficiales.

El ataque comenzó alrededor de las 2.00 hora local (21.30 GMT del domingo) desde los cuatro puntos cardinales de la ciudad y en estos momentos se mantienen "intensos combates" a pocos kilómetros del centro de la ciudad, indicó a Efe Mahfuzullah Akbari, portavoz del jefe de la Policía regional.

"Nuestras tropas estaban preparadas y defendieron firmemente la ciudad y ahora tropas de tierra mantienen duros combates con los talibanes con apoyo aéreo", agregó.

CARRETERAS CERRADAS

Las zonas de Zakhil Qadim y Zanjir Khakani, en el primer distrito policial en el oeste; Bandaar Imam Sahib, en el norte; Zanjir Charkhow, en el este, y Sedarak, en el sur, están bajo ataque, y todas las carreteras de acceso a la ciudad están bloqueadas.

Los talibanes han tomado posiciones en casas de civiles y avanzaron durante la noche, pero con al alba las fuerzas afganas comenzaron el contraataque.

"Nuestras tropas ahora están despejando la zona lentamente para evitar bajas civiles", agregó el portavoz.

ESTRATEGIA DE PÁNICO

Akbari indicó que, tras entrar en la ciudad, los talibanes lanzaron fuego de morteros y detonaron explosivos para crear pánico en la población, pero sin producir víctimas.

El vicepresidente del Consejo Provincial de Kunduz, Amruddin Wali, indicó a Efe que algunos residentes tuvieron la oportunidad de abandonar la ciudad hacia las localidades vecinas, pero que la mayoría de la gente está atrapada por el cierre de las carreteras.

El portavoz talibán, Zabihullah Mujahid, indicó a Efe en un correo electrónico que los talibanes lanzaron "ofensivas masivas" contra la ciudad y han tomado cuatro puestos de control, al tiempo que aseguró que las tropas afganas han sufridos "serias bajas".

Los talibanes lograron en septiembre del año pasado controlar Kunduz durante dos días, en su mayor éxito desde la invasión estadounidense en 2001, pero fueron expulsados tras una contraofensiva militar con apoyo aéreo de EEUU.