El presidente de EEUU, Donald Trump, presentó este jueves una demanda en un tribunal federal de Nueva York contra el fiscal de distrito de Manhattan, Cyrus Vance, en un intento por impedir que obtenga los registros de sus declaraciones de impuestos.

Los abogados de Trump presentaron la demanda en el tribunal federal para el distrito sur de Manhattan, un documento de 20 páginas en el que también se denuncia a la firma de contabilidad Mazars y en el que el mandatario recuerda que como presidente en ejercicio de EEUU, "no está sujeto a un proceso criminal".

"Sin embargo, un fiscal del condado en Nueva York, en lo que parece ser la primera vez en la historia de nuestra nación, está intentando hacer exactamente eso", señala el documento legal. Afirma que, por lo tanto, la acción de la Fiscalía de Manhattan de requerir dichos documentos a la firma de contabilidad Mazars "es inconstitucional".

La Oficina del Fiscal de Distrito de Manhattan emitió una orden el pasado agosto requiriendo que se le entreguen las declaraciones de impuestos de las ganancias personales y corporativas de los últimos ocho años de Trump.

Oportunismo

La Fiscalía pidió los documentos a la firma Mazars USA, que llevó la contabilidad tanto de Trump como de la Organización Trump, como parte de una investigación que realiza sobre pagos de dinero en secreto a la actriz porno Stormy Daniels.

"Los que redactaron nuestra Constitución entendieron que los fiscales estatales y locales estarían tentados a investigar criminalmente al presidente para avanzar en sus propias carreras y en sus propias agendas", indica además la demanda.

El abogado de Trump, Jay Sekulow, anunció este jueves la acción legal "en nombre del presidente para abordar los importantes problemas constitucionales en juego en este caso", según medios locales. Se informa además de que Danny Frost, el portavoz del fiscal Vance, confirmó que han recibido la demanda y que "responderán según corresponda en el tribunal".

Trump es el primer presidente desde Gerald Ford (1974-1977) que no publica cada año su declaración de impuestos, una tradición que sus predecesores consideraban parte de su deber de transparencia y rendición de cuentas ante el pueblo.