"A partir de hoy, América primero". El nuevo presidente de EEUU, Donald Trump, ha prometido este viernes en su discurso de investidura devolver a Estados Unidos su "grandeza,su orgullo, su seguridad", en un discurso más parecido a un mitin de campaña y en el que ha repetido las ideas que le llevaron a la victoria electoral en noviembre.

Así ha proclamado que el traspaso de poder no es solo de una Administración a otra, sino que él devuelve "el poder de Washington a la gente". "Este es el día de vuestra celebración", ha dicho, "el día en que la gente toma las riendas de este país otra vez".

"A mis conciudadanos estadounidenses y a la gente del mundo, gracias", ha dicho Trump al comenzar su discurso de toma de posesión en Washington, nada más jurar el cargo ante las escalinatas del Capitolio."Juntos, determinaremos el rumbo de Estados Unidos y de todo el mundo durante muchos, muchos años", ha dicho subrayando, que el mundo "nunca ha visto un movimiento" como "el de una nación que sirve a sus ciudadanos".

Una proclama agresiva

El dirigente prometió hacer un discurso filosófico y le ha salido una proclama muy agresiva, alejada del tono solemne empleado por sus antecesores. "A partir de hoy, una nueva visión va a gobernar nuestro país. A a partir de hoy, será América primero", ha insistido en varias ocasiones.

En sus primeros minutos de presidente, Trump ha recuperado buena parte de sus promesas electorales. Así, ha dicho devolverá a Estados Unidos sus "fronteras y sus sueños" y no ha ahorrado en críticas: "Hemos defendido las fronteras de otros países mientras negábamos defender la nuestra".

Ha prometido también erradiar el "terrorismo islámico radical"y se ha referido a la falta de trabajo, de ilusiones y a los mútliples problemas que afronta la castigada clase media estadounidense de las ciudades del interior que le dio su voto.

No ha ha ahorrado críticas a la clase política y ha recuperado su discurso 'anti-establishment' Así, ha asegurado que "el tiempo de las promesas vacías se ha acabado". " Ya no es el tiempo de políticos que solo hablan y no actúan", ha dicho. "Washington ha florecido, pero la gente no ha compartido esa riqueza. Los políticos han prosperado, pero los trabajos se han ido y las fábricas han cerrado. El 'establishment' se protegía a sí mismo, pero no a los ciudadanos del país", ha indicado.

"Vamos a hacer Estados Unidos fuertes de nuevo, lo vamos a hacer ricos, orgullosos, seguros y, juntos, lo vamos a hacer grande de nuevo", ha señalado.