El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quiere unas mejores condiciones para el futuro superavión presidencial, el mítico Air Force One, y a través de Twitter -su fórmula preferida para hacer anuncios y dar a conocer sus opiniones- ha pedido la anulación pura y simple del contrato con el constructor estadounidense Boeing.

Boeing is building a brand new 747 Air Force One for future presidents, but costs are out of control, more than $4 billion. Cancel order!

— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) December 6, 2016 >

"Boeing ha construido un Air Force One 747 nuevo para los futuros presidentes, pero el coste es muy alto, más de 4.000 millones de dólares. Anulad la demanda", ha escrito Trump. Más tarde, en un intercambio de impresiones con los periodistas que hacen guardia en el vestíbulo de la Trump Tower, ha calificado de "absolutamente ridícula" la cantidad que el gigante estadounidense de la aeronáutica por el avión. "Queremos que Boeing gane dinero pero no tanto", ha dicho.

De momento, Boeing no ha hecho ningún comentario. En enero pasado obtuvo el contrato para remplazar el Air Force One. Los dos aparatos que utiliza Barack Obama y que debe heredar Donald Trump fueron encargados por Ronald Reagan y entraron en servicio en 1990.

El Air Force One permite al hombre más poderoso del mundo ejercer todas las prerrogativas de su mandato cuando se encuentra a bordo, incluso ordenar y desencadenar un ataque nuclear.