Turquía y Rusia han acordado un plan para que las partes beligerantes del conflicto sirio declaren un alto el fuego en todo el país árabe, aseguró este miércoles una fuente turca que pidió el anonimato a la agencia estatal de noticias Anadolu.

Según la fuente, el plan se aplicaría en todas las zonas en las que las tropas del presidente sirio, Bachar Asad, y sus aliados (principalmente rusos e iraníes) estén combatiendo a la oposición armada, que incluye desde moderados hasta yihadistas. De este modo, “las organizaciones terroristas serán excluidas del trato”, en referencia ciertos grupos extremistas y el Estado Islámico, aunque no queda claro si las zonas controladas por los kurdo-sirios del PYD (considerados terroristas por Turquía y quienes dominan gran parte del norte del país) están contempladas en el acuerdo.

Anadolu indicó que Ankara y Moscú trabajarán para que el acuerdo se ponga en marcha en la medianoche de este miércoles.

De funcionar el trato, “las negociaciones políticas” de paz empezarán en Astana bajo el auspicio de Turquía y Rusia, quienes se han erigido en negociadores por la paz en Siria, dejando de lado a Washington (actualmente en un impasse entre la administración saliente de Obama y el nuevo gabinete de Trump).

MEDIO MILLÓN DE MUERTOS

EEUU ha perdido toda iniciativa en Siria, una guerra que comenzó en marzo de 2011 y, hasta la fecha, ha dejado casi medio millón de muertos (más de la mitad de ellos causados por las tropas leales a Asad) y unos 10 millones de desplazados.

El pasado viernes, el presidente ruso, Vladimir Putin, anunció haber acordado que Turquía y Rusia (quienes apoyan a bandos enfrentados de la guerra) llevarían a representantes sirios a la capital kazaja.