Hay dos elementos sobre los que ya hay consenso en la Unión Europea en relación al brexit. La primera, que debe haber un aplazamiento de la salida del Reino Unido, prevista para el próximo 31 de octubre. La segunda, que no habrá cumbre extraordinaria la próxima semana y que el trámite culminará por procedimiento escrito. Lo que no han conseguido acordar este viernes los 27 embajadores europeos es de cuánto tiempo será esta prórroga extra. La decisión tendrá que esperar a la próxima semana, apurando de nuevo los plazos.

La UE esperará a que el Reino Unido decida si convoca o no elecciones generales anticipadas, tal y como ha planteado el primer ministro británico, Boris Johnson. El Parlamento británico debe tomar una decisión el lunes. Si secunda los planes del líder de los tories, el camino hacia un aplazamiento de tres meses, hasta el 31 de enero del 2020 tal como solicitó por carta el Gobierno británico hace una semana, quedaría despejado. Si la Cámara rechaza los comicios la presión aumentaría y algunos estados miembros, como Francia, podrían imponer su tesis de una prórroga corta, de días o semanas, para obligar a Westminster a acelerar la ratificación y terminar cuanto antes con la incertidumbre.

Los embajadores de los 27 volverán a reunirse a principios de la próxima semana, probablemente el martes, para un "finalizar un acuerdo", han explicado fuentes europeas. "Tenemos más o menos hasta el martes para tomar una decisión", han confirmado fuentes diplomáticas que reconocen que se trata de "un tema muy volátil", con novedades y giros inesperados cada día, y que lo que tienen que ver "es lo que más conviene a Europa".

Pese a la decisión de aplazar la decisión hasta la próxima semana, la reunión de dos horas entre los 27 embajadores se ha saldado con mensajes positivos. "Ha sido una discusión excelente", aseguraba a la salida el negociador europeo, Michel Barnier. "Ha sido una reunión constructiva y ha habido acuerdo pleno sobre la necesidad de una extensión", han explicado fuentes europeas. Los 27 también han coincidido en la necesidad de llegar a un consenso la próxima semana y a que no habrá cumbre extraordinaria en Bruselas. "Tusk no tiene la intención de convocar un Consejo Europeo especial", aseguran fuentes europeas.