La amenaza del ‘brexit’ está vaciando de talentos las universidades británicas. Más de 2.300 académicos de la Unión Europea (UE) han renunciado a sus puestos en la enseñanza superior del Reino Unido durante el pasado año. Las cifras contenidas en un informe de la British Academy, al que ha tenido acceso el diario 'The Independent', suponen en el 2016 un incremento del 19% en las dimisiones del personal académico europeo, comparado con los datos anteriores al referéndum de salida de la UE.

El mayor número de renuncias se produjo en una de las más valiosas instituciones, la Universidad de Oxford, con la marcha de 230 académicos europeos el pasado año, comparado con 171 en el curso 2014-2015. King's College, en Londres, perdió 139 de sus profesores, comparado con 108 antes de la consulta. Otros 173 académicos europeos renunciaron al puesto en la Universidad de Cambridge el pasado año, una cifra que supera a los 153 que se marcharon el año anterior o a los 141 en el 2014-2015.

Las principales universidades británicas temen que algunas asignaturas se vean especialmente afectadas por el ‘brexit’. En los departamentos de Ciencias Económicas el 36% del personal es profesorado europeo; en el de Lenguas modernas el porcentaje es del 35%. Peligran también los departamentos de Matemáticas (29%), Física (28%), Clásicas e Ingeniería química (26%), y Política junto a Relaciones Internacionales (25%).

Llamamiento

La primera ministra, Theresa May, ha hecho un llamamiento a los ciudadanos de la UE para que permanezcan en el país, asegurándoles que son bienvenidos y conservarán sus derechos. Pero la perspectiva de cambios en las normas de inmigración y la falta de garantías claras y concretas en otros puntos persisten. Jóvenes académicos se preguntan, por ejemplo, si sus cualificaciones seguirán siendo válidas tras el 'brexit'. Otros temen no poder acceder a las ayudas y subvenciones europeas para la investigación después de la salida. La portavoz de Educación de los liberal-demócratas, Layla Moran, ha calificado de "alarmante" la pérdida de académicos europeos. "Es el último indicio de los daños que causa el ‘brexodus’".

Casi 40,000 ciudadanos de la UE trabajan actualmente en las universidades británicas, lo que constituye el 12% del personal a tiempo completo en el sector de la educación superior.

La limitación de visados a estudiantes extranjeros es otra gran preocupación de las universidades, que están buscando nuevas opciones. La escuela de Empresariales de la Universidad Queen Mary de Londres ha decidido comenzar a impartir cursos en París, en paralelo a los de la capital británica. Personal de la Universidad de Leicester ha visitado varios países europeos, incluida España, para abrir un campus en el continente. En Dublín, el Trinity College está invirtiendo 90 millones de euros en la construcción de un nuevo edificio que albergará una futura escuela de Empresariales.