El Benjamín Roda es un equipo aplicado y con una gran imaginación. Tanta, que incluso uno de sus jugadores, Yago Cabrero, se imagina que está jugando a un conocido videojuego de fútbol cuando está sobre el terreno de juego. Todo suma. Todos aprenden a pasos agigantados.
Los cuatro entrenadores con los que cuenta este Benjamín Roda (Borja Burriel Vidal, David Pérez Pérez, Vicente Benlloch Alcaina y Mauro Castillo Romero) velan por la formación continua de los jóvenes talentos que están demostrando partido tras partido, entrenamiento tras entrenamiento, que tienen un enorme futuro en el club de sus amores.
Cada pequeño futbolista tiene marcados unos objetivos que tiene que cumplir a lo largo de la temporada. Cuando lo supera, se enfrenta a uno nuevo con tal de seguir mejorando. Todo, consensuado entre futbolista y entrenadores, que se reparten el seguimiento de los pequeños talentos del Benjamín Roda.
“Al entrenar tres días por semana y estar siempre en contacto con el balón, los jugadores van acumulando experiencias, conceptos y al final van aprendiendo poco a poco”, comenta David Pérez, uno de los técnicos.
PUNTO FUERTE // “Sin balón somos un equipo muy difícil de superar, con jugadores muy fuertes físicamente. Se lo ponemos muy difícil a cualquier equipo de la competición”, asegura Borja Burriel, otro de los cuatro entrenadores.
En la formación de los jugadores también juega un papel fundamental la labor de los padres. “Esta temporada estamos haciendo reuniones trimestrales con ellos para conocerlos un poco mejor y trabajar sobre una base sólida”, afirma David Pérez.
El resultado, en un equipo tan joven, queda en segundo plano. Más teniendo en cuenta que el objetivo principal es formar jugadres autónomos que sepan gestionar todo tipo de situaciones dentro del terreno de juego.
El Benjamín Roda, un conjunto repleto de energía. H
