La Vall exhibió en el 2015 un total de 28 toros cerriles menos que el año anterior, aunque el número de días taurinos no descendió, puesto que se sustituyeron por más jornadas de vaquillas. Son datos que recoge el anuario taurino que ayer se presentó en el municipio y que muestran cómo la localidad se ha adaptado al contexto de dificultades económicas sin renunciar a los festejos.

El autor de la publicación, Fernando Martínez, apunta precisamente en las primeras páginas de este sexto anuario que los toros “forman parte del ADN que los valleros atesoran desde tiempos ancestrales”. De hecho, para este aficionado, la Vall es “un referente a nivel estatal” en materia taurina, y cree que su trabajo puede servir para consolidar esta tendencia y para “dar a conocer” todo lo que hacen “en materia taurina en la ciudad, tanto en celebraciones como en otros ámbitos como la seguridad, por ejemplo”.

Para esta edición se han lanzado 1.000 ejemplares, que se repartirán entre las distintas fiestas de la localidad, así como en las instituciones que colaboran económicamente para hacer posible el proyecto. Esto es, el consistorio, la Diputación de Castellón y la Caixa Rural la Vall San Isidro.

En el acto de ayer se entregaron 200 ejemplares entre los invitados y también enviarán “a otras poblaciones y ganaderías, por lo que esta revista estará en toda España”, según Martínez. H