Tras 10 años de trámites burocráticos y numerosas modificaciones del proyecto de reparcelación para eliminar cualquier error en el mismo, el Ayuntamiento de Vila-real desbloquea definitivamente la unidad de ejecución I-24/AR-22, que afecta a una superficie de casi 150.000 m2 del polígono industrial ubicado a ambos lados de la carretera de Onda. Un polígono que, pese a que se dividió en una cuarentena de áreas, sigue con la paralización de su urbanización, que el consistorio adjudicó a la Urbanizadora Plana Baixa en el 2000.

A pesar de que la unidad desbloqueada constituye una pequeña parte de los cerca de tres millones de metros cuadrados que abarca el polígono empresarial de la carretera de Onda, el concejal de Territorio, Emilio Obiol, destaca la importancia de la medida que ahora adopta el Ayuntamiento respecto a este área de reparto, en la que se encuentra la firma Todagrés, por cuanto “se podrán conceder licencias de obras, tanto para ampliar empresas existentes como para dar garantías a nuevos inversores”.

Además, Obiol señala que “a partir de la toma de esta decisión, ya se pueden devolver los avales en dinero que depositaron en su día los propietarios de las parcelas afectadas, por cuanto la propia finca servirá como garantía para sufragar los gastos que conllevará la urbanización”.

La operación también permitirá inscribir a nombre del Ayuntamiento de Vila-real, en el Registro de la Propiedad, una parcela con un aprovechamiento de 19.938 m2 de techo, por la que el municipio tendrá que invertir unos 350.000 euros por gastos de urbanización, aunque cabe la posibilidad --como se contempla en el programa de actuación integrada del polígono industrial de la carretera de Onda-- de que el consistorio subaste la finca a su nombre resultante de la reparcelación de la unidad de ejecución, pasando las cargas para el desarrollo de la zona al nuevo propietario de este solar. H