Llum antiga con todo su esplendor. Un año más las gaiatas saldrán al encuentro con los castellonenses en un cortejo de fulgor, destellos y del protagonismo de la luz como hilo conductor esencial de las fiestas de la Magdalena.

Luminarias simbólicas de alegorías y metáforas, de lirismo y poesía. Y también de esfuerzos consumados que cobrarán vida en la noche jubilosa del tercer domingo de Cuaresma. Cuando faltan apenas 72 horas para el Desfile de Gaiates, patrocinado por Mediterráneo, y que completa la clásica trilogía conformada por la procesión de penitentes y el regreso oficial de la Romeria en el día más hermoso del año para la capital de la Plana.

Frenética actividad en los almacenes y talleres de las gaiatas, donde los artistas y miembros de las comisiones se afanan en un trabajo a contrarreloj, en una lucha contra el tiempo entre el estrés y el sacrificio desinteresado por hacer gaiata, fer gaiates per a Castelló en Magdalena.

ILUMINACIÓN, CRISTALERAS... // Una ronda a vuela pluma entre algunos presidentes de gaiata reflejan nervios, inquietud y «todavía un par de noches sin dormir» para tener acabado definitivamente el monumento. De esta forma, se expresa el titular de la gaiata Crèmor, José Antonio Lleó.

Reconoce que les faltan «muchas cosas». «Hay que perfilar la iluminación, colocar las cristaleras e instalar algunas piezas», señala el máximo responsable del sector de la plaza de España y calles adyacentes, quien, eso sí, se muestra absolutamente confiado en que «la gaiata saldrá» en la noche del día grande de «las fiestas». Una obra que, con el lema La nostra legenda, quiere reflejar la mitología castellonense. Desvelo también en Carlos Chippirraz Gómez-Milián, presidente de Sensal. Si bien confiesa que su monumento está prácticamente acabado, asegura que falta programar las luces y algunos retoques.

Cuenta lo mismo Luis Fernández, presidente de La Cultural. «Tenemos la arquitectura perfilada, pero todavía faltan cosas, como instalar las luces», explica el titular de la gaiata 19, que apuesta este año por una obra «monumental» que les está costando «mucho trabajo y tiempo».

En el polo opuesto y con monumentos totalmente finalizados está Hort dels Corders. «Hace dos semanas que acabamos la gaiata», afirma la presidenta de la entidad, Arantxa Miralles.

Como Forn del Pla. Su titular, Luis Sánchez, indica que ya solo queda «revestir el monumento con el faldón y algún otro elemento complementario».