Su dulce voz entrecortada, entre la emoción y el orgullo de su madrinazgo, al otro lado del hilo telefónico, refleja el entusiasmo y la ilusión magdalenera, transmitida desde las raíces familiares y el aprecio a las tradiciones (su madre, Verónica, fue madrina, también en la 6, en 1988 y dama de la ciudad en 1989). Alejandra Gallén Montañés confiesa que «siempre había querido ser madrina» y oficialmente lo será en el Palau de la Festa, cuando reciba la banda acreditativa del sector de la plaza de la Independencia. Un deseo cumplido en su cuarto año de pertenencia a la asociación de luz de Farola-Ravalet.

«Me lo paso muy bien dentro de la comisión, jugamos, hablamos, bailamos...», relata Alejandra con el convencimiento de estar viviendo unos meses especiales, una experiencia irrepetible en la promesa de futuro de los festejos mayores como son los niños del país castellonero en la estructura oficial de la fiesta.

Para ella, los actos fundamentales de la semana grande son la «romería a la Magdalena y el Desfile de Gaiates», y lo manifiesta desde la seguridad de quien conoce a la perfección cada una de las ceremonias de la semana grande. Y en los días anteriores a la Magdalena lo que más le gusta es la presentación, «por el espectáculo de bailes y música» que les van «a dedicar», comenta.

«Todavía no estoy nerviosa, pero cuando llegue el momento creo que sí que estaré», asegura Alejandra sobre cómo está viviendo la espera de la ceremonia en la que será investida como princesa de Farola-Ravalet.

La madrina infantil de la gaiata 6 tiene 10 años y estudia quinto curso de Primaria en el colegio Gaetà Huguet. Dice que sus compañeros de clase «están muy contentos» de que sea la representante infantil de la plaza de la Indepedencia y calles adyacentes.

Algunas de estas compañeras de aula estarán presentes mañana en el Palau de la Festa para acompañarla en el desfile triunfal hacia el escenario del recinto festero para recibir la banda de madrina infantil de la gaiata.

«QUIERO SER MAESTRA» // De las materias escolares manifiesta su predilección «por la Educación Física, Castellano y Valenciano». A la pregunta de qué es lo que quiere ser de mayor, responde con rotundidad y muy segura «maestra», porque le gustan mucho «los niños», indica.

Aparte de sus actividades escolares y las propias del madrinazgo, Alejandra practica el balonmano en el equipo de su colegio y durante un año tocó el piano. Pero ahora sus pensamientos están centrados en esas horas de espera jubilosa para vivir su presentación oficial como madrina infantil 2017 de la gaiata de la plaza Independencia.