Mediterráneo ha finiquitado con éxito a lo largo de la semana la última edición de su Bodeguilla, un encuentro ya tradicional en la que el rotativo ha convocado a toda la sociedad castellonense. La asistencia ha sido este año, si cabe, más destacada que en ejercicios precedentes, tanto por la cantidad como por la calidad de los invitados que han acudido al Hotel Jaime I.
Hasta la cita han acudido personalidades, principalmente de Castellón, pero su alcance va más allá, ya que no han faltado representantes políticos autonómicos, encabezados por el jefe del Consell, Ximo Puig, y un buen número de sus consellers; y provinciales, con Javier Moliner a la cabeza.
También han estado presentes políticos de numerosas localidades como Vila-real, Benicàssim, Moncofa, l’Alcora, Almassora, Burriana, la Vall d’Uixó, Nules, Orpesa, la Vilavella o Peñíscola, entre otras muchas, con la presencia de sus autoridades municipales.
En cuanto a la participación del empresariado no han faltado delegaciones de Iberdrola, Marina d’Or, Facsa, FCC Fobesa, UBE, Cajamar, Estepark, BP o Salera, además de numerosas pymes que conforman el tejido económico de la provincia y a los que tanto arropa Mediterráneo en su día a día.
El deporte, la educación, la cultura y el arte, la sanidad, los sindicatos, las fuerzas de seguridad o el mundo de la fiesta también han tenido su espacio y fueron agasajados por los equipos de redacción y comercial del periódico, encabezado por su director, José Luis Valencia, al director general de PECSA, Enrique Simarro, y su director comercial, Jesús Dualde.
Con todo, Mediterráneo ha mostrado de nuevo que sus vínculos con Castellón son sólidos y se vuelve a significar como principal ‘altavoz’ de todas sus demandas. H
