De la festa, la vespra!, dice el aforismo popular. Y es que el aroma de Magdalena se dejaba sentir ayer en las calles como anuncio jubiloso de las fiestas.
Comisiones de sector, collas e instituciones reunían ya a sus miembros en encuentros y citas inexorables y sin solución de continuidad.
Era el caso de los Templarios de Castelló. La Magdalena entrando por las puertas templarias. Un colectivo que inauguró su nuevo cau en la calle Alicante con presencia de las reinas de las fiestas, Natalia Palacio y Natalia Collazos, y la alcaldesa, Amparo Marco.
Oficialidad, animación y jolgorio en la tarde-noche de la víspera del inicio de las fiestas mayores de la ciudad turquesa y naranja. En el Espai Gaiater se ultimaban los monumentos festeros con unos comisionados ilusionados con sus símbolos que desfilarán en la noche del tercer domingo de Cuaresma, en un trabajo contra el reloj entre el vértigo y la esperanza para ver acabadas sus arquitecturas efímeras de luz.
Algunas comisiones, con el monumento acabado, celebraron su bautizo. Mientras, la Colla del Rei Barbut entregaba su tradiconal Voladoret d’Or a la Federació de Colles.
