L a ciudad turquesa y naranja en clave gaiata 8 es la medieval y la de los recuerdos y añoranzas. La de un Castellón que permanece en el recuerdo y en la memoria colectiva de muchos ciudadanos que evocan todavía aquella pequeña urbe de alegrías compartidas y sencillez ciudadana. La del antiguo solar de Santa Clara que fue en su día cenobio de monjas Clarisas y más tarde, primer instituto de enseñanzas medias, precursor del actual Francisco Ribalta.

Portal de l’Om amurallado con sus calles y plazoletas de raigambre. Como la plaza Hernán Cortés, el carrer Caçadors, el carrer Peixcadors, el carrer Ramón María de Campoamor (antic camí al mar), el carrer Sanchis Abella, Obispo Climent... Calles y palacetes, como el flordelisado de los Miquel; la Casa dels Orfens, antigua residencia del obispo Climent; y en el límite de la demarcación territorial del guarismo 8 con la de la gaiata 7, la casa solariega de la Marquesa de San Joaquín.

Princesa de las ciudades, Castellón muestra en el sector 8 un encanto especial, unas razones prometedoras de pasado y juventud, una alquimia de profundos sentimientos para la más bella de las ciudades. La ciudad de la Plana en toda su extensión tiene en la gaiata 8 el carisma que resume la personalidad propia y característica de la más septentrional de las capitales de provincia de la Comunitat Valenciana.

PRESTIGIO // Sí. Este sábado le toca el turno a Portal de l’Om. Es su presentación oficial a las 23.00 horas en el Palau de la Festa. Con su historia, una de las comisiones más longevas de la ciudad, data de 1945, con su prestigio, con su vitola de ganadora --a base de mucho trabajo, dedicación e iniciativa-- y mucha organización, con sus propuestas renovadoras, con sus ideales de la gaiata como colectivo esencial y fundamental de las fiestas de la Magdalena, pero tendiendo siempre puentes a la colaboración y al empeño de engrandecer los festejos. Portal de l’Om. De Magdalena. De Castellón.