Más de 2.000 participantes de 110 collas y un centenar de carros han desfilado desde la calle Sanahuja hasta la calle Mayor en el primer desfile de collas, enmarcado en el 25º aniversario de la fundación de la Federació de Colles y pensado para dar protagonismo a estos colectivos que son pieza fundamental de la Magdalena, según explica el presidente de la Federació de Colles, Pepe Beltrán.

El desfile se abrió al son de la dolçaina i tabal de El Soroll, Xarançaina, Castalia, Xaloc y la Plana, entre otros, que después participaron en el XVIII Homenaje a la Dolçaina i el Tabal. Tras ellos, un río de carros engalanados, de Arrancapins, Arròs Caldós, Fartonets, Vaqueries, Tombatossals, El Barquero i uns quants més, Xalem, L’Esclat, La Font Trencà, La Lledonera, Xino Xano (primer premio del concurso de vehículos engalanados)... y así hasta un centenar de carros de collas, que dejaron rienda suelta a su imaginación, no solo para decorar sus medios de transporte, sino también en sus vestimentas, ya que muchos salieron disfrazados, aportando el toque colorido a la singular cabalgata.

Las charangas hicieron el resto para crear un ambiente festivo del que disfrutó el público, que siguió el recorrido, recogiendo los centenares de caramelos y otras golosinas que lanzaron desde los carromatos. Fue sin duda una de las iniciativas que más visibilidad da en estas fiestas a las más de 100 collas de la capital.