Princesa de Sensal. Tesoro de niña que está viviendo los maravillosos y emocionados momentos de su madrinazgo infantil en la gaiata de la plaza de Miguel Bellido. Judith García Rincón, a sus 8 años, tiene el privilegio de ostentar la representación infantil de uno de los sectores de la ciudad surgidos en los años 80 del pasado siglo, una de las grandes etapas de esplendor de las comisiones de luz, y que todavía se recuerda como el de mayor apogeo de los colectivos esenciales de las fiestas.

Parca en palabras, entre la timidez y la ternura de su corta edad, Judith asegura que los actos magdaleneros que más le gustan son “la subida a la romería y el Coso Multicolor”, cuando tiran confeti, indica en arranque de frases que se van entrelazando.

Pero, sobre todo, resalta lo bien que se lo pasa en el seno de la gaiata, asistiendo a diversas celebraciones y eventos como la visita que con el presidente y la madrina realizó a Soneja y Benafigos, localidades hermanadas con la gaiata Sensal desde tiempo inmemorial, y que se refrenda todos los años con la presencia de una delegación del sector 13 en las presentaciones de las reinas de las fiestas de estos municipios.

Estudiante de cuarto curso de Educación Primaria en el colegio Lope de Vega, confiesa que todavía no ha comentado apenas a ningún compañero de clase su protagonismo festero. “A una amiga sí que se lo he dicho”, comenta la madrina infantil.

Si el año 2016 para Judith fue muy importante porque ha tomado la primera comunión en la parroquia de San Francisco, el 2017 promete ser el de las vivencias magdaleneras con sus galas de castellonera ocupando el trono de los niños de Sensal. H