El sentimiento y la tradición invadieron el sábado por la noche el Palau de la Festa en la cita ilustre de la gaiata l’Espartera. Y es que el sector de la 9 preparó un encuentro deslumbrante para presentar ante sus vecinos a sus máximas representantes para el 2017, Mónica Barba y Mar Valle. Una ceremonia que desbordaba folclore por cada rincón del recinto al seguir un hilo temático de prestigio: el origen de Castellón de la Plana.
L’Espartera embelesó a los componentes y amigos del sector de la Avenida del Mar en un viaje al año 1251, cuando Jaume I permitió trasladar la villa a la llanura. Así comenzó la emocionante velada en el Palau de la Festa, guiada por la voz de Arturo España.
Con esta representación de fondo y con la estampa de la familia gaiatera al completo abrieron camino hacia el escenario los portaestandartes Eric Escrig y Manuel Martínez como alféreces de la 9 y acompañados por las colaboradoras Iris Macías, Teresa Gas y María Beltrán.
En el escenario, para escenificar a los protagonistas de la historia castellonense, unos brillantes Pablo Simó y Jennifer Durán dieron vida a Jaume I y Na Violant, mientras que Pablo Leganés y Josep Millet representaron a un fiel noble y a un humilde escriba.
Pero para recibir a las nuevas representantes de l’Espartera, las madrinas del 2016, Leire Ferrando y Rosana Nebot recorriendo por última vez el pasillo del Palau de la Festa para ocupar sus respectivos tronos magdaleneros, acompañadas del estruendo de Els Tambors i Bombos de Combat Desperta, Ferro!.
Seguidamente tomaron sus respectivos asientos en el escenario el resto de la comitiva para el 2017, las niñas Paula Pérez y Ainhoa Valle, seguidas de las damas Elisabet Carmona, de la mano de David Gómez y Ana María Martínez custodiada por Francisco Carmona.
Con el escenario al completo, el público en pie y un caluroso aplauso Mónica y Mar desfilaron de la mano del presidente, Rafael Quiroga para acceder al trono y entregarse como las máximas cabezas visibles de la gaiata para las próximas fiestas fundacionales.
Mónica y Mar pudieron disfrutar desde lo alto del Palau de la Festa de una presentación digna de las Fiestas de la Magdalena. Las madrinas salientes fueron asignadas como gaiateras d ‘honor para el 2017 para que estén siempre en el corazón de la 9.
Y como no podía ser de otra forma, las nuevas madrinas de l’Espertera recibieron el cariño de los amigos del sector en el acto de la ofrenda. Para rendir pleitesía participaron el Ayuntamiento de Betxí y el de Orpesa, La Federación de Collas, la Gestora de Gaiatas representada por Brancal de la Ciutat y ofrendas del Centro Andaluz y Aragonés entre otros.
Tampoco faltaron las palabras de agradecimiento e ilusión para las nuevas madrinas que despidieron a sus predecesoras, que dijeron adiós entre lágrimas a su reinado en l’Espartera tras un ciclo de dedicación plena a las fiestas fundacionales.
Ahora es el turno de Mónica y Mar para que continúen la historia y tradición de l’Espartera escribiendo las nuevas andadas que vivirán en este nuevo ejercicio. H
