E s la princesa de Brancal de la Ciutat. La reina de corazones y la más ballaora de una comisión infantil llena de vitalidad, de sonrisas, de ganas de festa plena, a pesar de que aún faltan cuatro meses para la semana grande de Castellón. Paula Beltrán Soler ascenderá al trono infantil de la gaiata 1 para la Magdalena del 2018 bajo la atenta mirada, desde el cielo, de su abuelo, el político y festero Miguel Soler, que le cantará bajito, bajito el Anem Anem, aupándola al escenario.

Ilusionada, orgullosa, expectante. Son adjetivos que le salen a borbotones a sus 11 años esta alumna de 6º en el colegio Manel Garcia Grau que, de mayor, quiere enseñar, quiere aprender primero muchos idiomas, sobre todo inglés, para transmitirlo a los niños. «Quiero ser profesora de Inglés, pero quiero saber todas las lenguas del mundo», dice, mientras cuenta a Mediterráneo que nació un día de Pregó infantil, lo que, como a la madrina mayor, María Iturralde, marcó su devenir festero. Y no solo eso. Porque de casta le viene al galgo. A su abuelo, al que siempre le decía que quería «vestirse de castellonera y salir en gaiata», se suma su tía, Zoila Soler, que fue madrina de la gaiata 5; y su madre, Clara Soler, presidenta de la Associació de Festes del Carrer Santa Bàrbara, que fue dama. Además, su hermanita Clara será su dama. Vinculados ya hace años a la gaiata 1, este 2018 será el año de la pequeña de la casa. Paula verá su sueño cumplido con «la abuelita siempre pendiente de que todo esté perfecto». En su armario festero, Paula combina elementos del vestir antic, de su tía y de su madre, con lo más nuevo, buscado especialmente telar por telar.

«Ir a la primera mascletà, el Pregó, la Ofrena y el Vítol» la emocionan, pero, sobre todo, espera que llegue ya «el Pregó infantil, que me recuerda a cuando nací; y la Romeria, cuando me visto de labradora». Y bailar, que es su pasión desde los 3 años. «Me encanta la música tradicional».