Todo el departamento de competición de la fabulosa y campeona fábrica Honda, es decir, HRC (Honda Racing Corporation), el equipo técnico de los circuitos, que dirige el ingeniero Santi Hernández, y Marc Márquez, su campeonísimo de los últimos años (seis títulos de MotoGP de los siete disputados), están convencidos de que la RC213V de este año es mejor que la del pasado año, pero…han llegado al trazado de Losail (Catar, Doha) y, de pronto, una moto que nunca ha sido favorita en ese circuito empieza a provocar algunos problemas “serios”, según los pilotos de Honda, en la entrada y trazada de las curvas.

Márquez, que al igual que su hermano Àlex y que el británico Cal Crutchlow, está seriamente preocupado y, tras el segundo día de test en Catar, ha reconocido que “ahora no me preocupa mi estado físico, ni siquiera los primeros grandes premios donde no estaré a tope, sino de encontrar entre todos cual es el problema que tenemos para solucionarlo cuanto antes. De ahí que estemos recogiendo la máxima información posible estos días, estudiarla y resolver el problema. Insisto, en Malasia no estábamos tan mal, lo que significa que nuestra moto es buena”.

CAÍDA DE MÁRQUEZ

El líder de Honda sufrió, en su proceso de recuperación física tras su operación, este invierno, en el hombro derecho, una caída muy fea al que él restó importancia. “Bueno, más que una caída”, le ha comentado a Izaskun Ruiz, en DAZN, que se ha tirado. “Me he tirado porque la he visto llegar y como físicamente no estoy para protagonizar aun salvada alguna, he preferido tirarme. Ha sido en un cambio brusco de dirección, de izquierda a derecha, que es en el que más sufro de momento, donde tiramos de tronco superior y, como no puedo, hago el gesto con las piernas y apoyándome mucho en las estriberas. Y, la verdad, me he apoyado demasiado en ella, se me ha cruzado la dirección y la he visto venir, por eso me he lanzado al suelo”.