El Serbia - Suiza de la pasada jornada dejó una polémica en el aire, la de la celebración de los jugadores suizos. Granit Xhaka y Xherdan Shaqiri, ambos de nacionalidad albanokosovar, festejaron sus goles haciendo la doble águila albanesa en una nueva demostración de la herida que ha dejado la Guerra de los Balcanes. La polémica estaba servida. Y las consecuencias han llegado en forma de sanción económica.

El Comité Disciplinario de la FIFA ha entendido que el gesto de los jugadores suizos infringe el artículo 57 del Código Disciplinario en cuanto a conducta antideportiva contraria a los principios del 'fair play'. Por eso, les ha multado con 10.000 francos suizos (unos 8.600 euros). La multa se ha extendido también al capitán del equipo, Lichtsteiner, que pese no tener lazos personales con Kosovo imitó el gesto de sus compañeros. Su castigo son 5.000 francos de multa (unos 4.300 euros).

Tras el partido se había llegado a hablar de una posible sanción en forma de partidos, pero finalmente la FIFA ha decidido que la pena sea solo económica. Eso sí, los jugadores han quedado apercibidos, pues el máximo organismo del fútbol internacional prohíbe los mensajes políticos en los estadios de sus competiciones y el símbolo de los suizos lo era. Y es que, tanto Xhaka como Shaqiri realizaron ese gesto en referencia a la 'Gran Albania' porque sus familias tuvieron que salir de Kosovo (estadio al que Serbia considera una de sus provincias) al inicio de los años 90 para exiliarse en Suiza huyendo del yugo yugoslavo.

Serbia también es sancionada

El partido entre suizos y serbios tuvo de todo. Para empezar, antes del envite la Federación Serbia pidió a la FIFA que no permitiera la entrada al estadio ni de banderas de Kosovo ni de la Gran Albania para no caldear el ambiente. Estas no se vetaron y fue la afición serbia la que acabó por encender la polémica. Exhibieron pancartas y mensajes discriminatorios durante el encuentro y lanzaron objetos al terreno de juego. Por eso, la FIFA también les ha sancionado. La Federación Serbia deberá pagar 54.000 francos suizos (unos 47.000 euros).

Su entrenador, Mladen Krstajix, se suma a la sanción con una multa de 4.330 euros. Y es que, tras el partido, que finalizó 1-2 coon victoria para Suicza, el técnico serbio se quejó contundentemente de la actuación del colegiado Felix Brich y del VAR. "Yo lo mandaría a La Haya. Ahí podrían juzgar como hicieron con nosotros", declaró haciendo referencia a la condena de las Naciones Unidas, por crímenes de guerra serbios, en la desintegración de la antigua Yugoslavia.