«Quiero ser dependiente de Neymar. ¿Qué entrenador en el mundo no querría un Neymar en su equipo, que esté bien, que consiga hacer lo que sabe hacer con excelencia, que haga la diferencia en un partido?». Las palabras de Rogerio Micale, técnico de la selección olímpica brasileña, reflejan lo que él y todo Brasil esperan del jugador del Barça. Que les conduzca hacia su primer título olímpico, algo con lo que limpiar el fracaso de la canarinha en su Mundial.

Neymar, que ya estuvo en la final de Londres 2012 perdida ante México, ha asumido el reto de hacer valer el favoritismo que se le otorga a su equipo, aunque dos días antes de esas declaraciones salió al paso de las críticas en las que cuestionaban su compromiso por haberse ido de fiesta. «Me podéis exigir lo que sea dentro del campo pero por qué no voy a poder salir de fiesta. Puedo salir y lo voy a seguir haciendo», dijo Neymar a ocho días de abrir su participación contra Suráfrica en el grupo A (mañana 4 de agosto a las 21.00 horas).

SIN DOUGLAS COSTA

Con Argentina en crisis, Brasil tiene todo a favor para ganar su primer oro, aunque se cayera otro de los grandes referentes del equipo, Douglas Costa, por una lesión muscular presuntamente irrecuperable. «Es una oportunidad única», ha dicho Neymar, que estará secundado por su compañero del Barça Rafinha, el central del PSG Marquinhos y las nuevas joyas brasileñas, Barbosa (Santos) y Gabriel Jesús (Palmeriras).

México, la defensora del título, se presenta como la otra gran candidata y su técnico, Raúl Gutierrez, no rechaza en absoluto ese estatus. Ha reforzado la plantilla con el goleador en Londres 2012, el delantero Peralta, Talavera y Torres Nilo, portero y defensa de la absoluta. Aspiran a seguir en lo más alto para lavar de paso la afrenta del 7-0 encajado ante Chile en la reciente Copa América Centenario.

Tampoco le vendría mal a Argentina el oro, que ya ganó en el 2004 y 2008, para quitarse el mal sabor de boca que les dejó la final de la Copa América, pero la misión se antoja complicada porque ninguna de sus figuras estará en Río. Tendrá que apoyarse en Correa (Atlético), el portero Rulli (Real Sociedad) y el goleador Calleri (Sao Paulo) como principales pilares. Debutarán también mañana en el grupo D ante Portugal, una de las posibles alternativas europeas.

DOMINIO ESTADOUNIDENSE

El oro es también el gran objetivo de la selección femenina brasileña, que vuelve a depositar buena parte de sus esperanzas en la incombustible Marta (38 años y cinco veces mejor jugadora mundial) y en la máxima goleadora en la historia del torneo olímpico, Cristiane, que afronta sus cuartos Juegos.

El gran problema es Estados Unidos, ganadora de cuatro títulos, que ya relegó a Brasil a la plata en los Juegos del 2004 y 2008. La selección estadounidense, dirigida por Jill Ellis, defiende el título conquistado en Londres ante Japón con 14 de las jugadores que ganaron el Mundial 2015 y siete de las que se colgaron el oro hace cuatro años.