Primera final de atletismo, primer récord del mundo en los Juegos Olímpicos de Río. La etíope Almaz Ayana ha destrozado literamente en la final directa de los 10.000 metros la plusmarca conseguida hace 23 años, en 1993, por la china Wang Junxia, superándola en más de 14 segundos. Junxia, integrante de la sospechosa 'armada' del entrenador Ma Junren, dejó el tope universal en 29.31.78 entonces. Ayana, en una impresionante carrera en solitario desd el kilómetro cinco, lo ha dejado en 29.17.45.

La carrera ha sido un monólogo de las atletas africanas, y sobre todo de Ayana, que se ha presentado en Río también con la mejor marca de 5.000 metros, distancia en la que es campeona mundial, por lo que sin duda intentará la doble victoria en los Juegos. Ayana ha mejorado en la segunda mitad de la carrera (ha hecho 14.33 minutos, por 14.44 en la primera) para imponerse con un amplio margen sobre la keniana Vivian Cheruiyot (que con 29.32.53 casi ha podido también con la anterior plusmarca) y sobre la etíope Tirunesh Dibaba (29.42.56), que buscaba su tercer título olímpico consecutivo en los 10 kilómetros tras haber sido madre hace 18 meses.