El primer problema de los castellonenses es la falta de empleo y mucho queda por hacer. Sin embargo, desde que concluyeron las principales reformas económicas a principios del 2013; laboral, financiera y del sector público fundamentalmente, hay varios indicadores laborales que merecen comentario:
1. En la provincia de Castellón el número de desempleados ha bajado en 27.526 personas. Del 32% al 19,5% actual
2. La caída del desempleo femenino ha sido espectacular, 17.500 mujeres menos en la fatídica lista. De 44.000 a 26.500 desempleadas, un 40% inferior.
3. Los menores de 25 años parados ya no son los 6.426 de hace cuatro años sino 3.713, un 42% menos.
El número de empleados crece en Castellón en 22.063 afiliados a la Seguridad Social.
Si tenemos en cuenta que, en ese periodo de cuatro años, nuestros jubilados son casi 5.000 más, vemos como por cada nueva pensión hay más de cuatro nuevos empleos, lo que supone que con políticas acertadas nuestras pensiones y la sociedad del bienestar.
Y el crecimiento es viable porque además de crecer la cantidad del empleo por fin crece la calidad de este, con las primeras subidas salariales tras la crisis y con gran crecimiento de contratos indefinidos. Hasta 7.405 personas de Castellón han firmado el nuevo contrato indefinido de apoyo a emprendedores para pymes y autónomos.
Sin embargo, estamos aún a mitad de camino, por eso en breve entra en vigor una serie de medidas de apoyo a los trabajadores autónomos que hará que el Estado pague la cotización a la Seguridad Social para trabajadores autónomos durante descanso por maternidad, paternidad o adopción, que se compatibilice trabajo con la percepción del 100% de la pensión si el autónomo tiene contratado, al menos, a un trabajador, el reconocimiento del accidente in-itinere a los autónomos, o la ampliación de la tarifa plana de 50 euros de 6 meses a un año para quienes inicien su actividad.
Con todo ello llama la atención que, siendo España la nación europea que más empleo crea, y Castellón creciendo más que la media, aquellos sindicatos que ferozmente se opusieron a la reforma laboral augurando que el paro llegaría a los 100.000 castellonenses --ya ha bajado a 43.000--, ahora en lugar de representar a los trabajadores anuncien una gran manifestación para el 9 de Octubre, contra el Gobierno de España, al grito nacionalista de «Madrid nos roba», aunque dicho más elegantemente.
Felizmente estamos en la senda de la recuperación, queda mucho por hacer pero las reformas aceleran y la creación de empleo se intensifica.
*Presidente del PPCS
