Sin contemplaciones, sin consenso, sin participación y sin acierto. Los gobiernos del cambio, quienes parecía que venían a darnos lecciones, están arrasando con todo. O lo intentan, con la oposición frontal de colectivos afectados, de una opinión pública que no entiende por qué les molesta tanto a esta nueva izquierda --que está donde está gracias a la izquierda de siempre-- lo que compartimos como tradición, lo que nos ha definido durante años.
En la Comunitat Valenciana, estamos viendo cómo el secuestro del gobierno autonómico por parte de Compromís está llevando a los socialistas a impulsar medidas que lo único que persiguen es acabar con los bous al carrer con exigencias económicamente inasumibles; poner en marcha una televisión pública, donde las fiestas que llenan nuestros pueblos y donde se celebra el toro no caben; instaurar prohibiciones para la pesca de litoral, donde siempre se habían compartido grandes momentos e historias frente al hilo de una caña. Todo les molesta.
Es una pena que tengamos que soportar cómo representantes municipales de sus principales aliados, los de morado, critican tradiciones de siempre, insulten a quienes más tiempo y esfuerzo dedican al cuidado y respeto de los animales, como el representante de La Roca, que se sube al carro de caballos para San Antonio y critica a los mayorales por la bajada del árbol. ¡Ya está bien! Si tenéis algún problema o complejo, hablad, empatizad y escuchad a quienes criticáis y contra quienes legisláis. Es inadmisible que se pretenda acabar con todo. Con consciencia medioambiental y con criterios de sostenibilidad, con consenso y con participación vamos a ganar mucho más todos, ahora y en el futuro, que con vuestra actitud despótica de querer tomar decisiones en nombre de un supuesto beneficio para quienes gobernáis, pero sin contar ni con su opinión ni con ellos.
Por encima de todo, respeto.
*Alcalde de Peñíscola
