Que nadie se lleve a engaño, al título de este artículo le falta un subtítulo fundamental para entender la época de bonanza que se avecina, evidentemente se acaba la miseria para los afines del Botànic y sobre todo para los familiares de Ximo Puig. Lejos quedaron los lloros y las lecciones de moral de la izquierda.

Después de revalidar el pacto del Botànic se han venido arriba. Si en su primera legislatura nos demostraron su incapacidad para la gestión, en esta tiene patente de corso para dedicarse a lo que mejor se les da, adoctrinar y colocar a los suyos.

Manda narices que uno de los chiringuitos de la izquierda para hacerle bullyng al PP, la Agencia Valenciana Antifraude, haya determinado que existen indicios de un posible fraude o corrupción en subvenciones que ha dado el gobierno valenciano para la promoción del valencià a empresas relacionadas con la familia de Puig como Más Mut Produccions S.L y Comunicacions dels Ports S.A, que se han valido para subvenciones, de artimañas fraudulentas y crear una trama para conseguir fondos públicos. Durante la pasada legislatura aumentaron sus ingresos un 290%. Eso sí que es un ejemplo de gestión.

Mientras tanto la sanidad sigue resintiéndose por la mala gestión. Ya ha anunciado el Botànic que la Consellería de Sanidad va a asumir los mayores recortes. Hay que ser realistas, para todo no da: si uno quiere colocar a 330 altos cargos, tener una tele pública, que no ve nadie, y dar subvenciones millonarias a la familia, de otro lado hay que quitar. Los valencianos son los que pagan, los que esperan a ser operados, los que esperan a tener colegio, los que esperan una financiación justa. Se acabó la miseria para la izquierda.

*Diputada provincial del PP