Las comarcas castellonenses están viviendo las mayores movilizaciones de citricultores de su historia. Ante una campaña que muchos califican como desastrosa, la Plataforma per la Dignitat del Llaurador está reivindicando el apoyo sin fisuras de las instituciones. Una llamada ante la que el president de la Generalitat, Ximo Puig, ya ha anunciado un Plan Estratégico de Reconversión del sector que garantice su viabilidad. Desde el Grupo Municipal Socialista respaldamos todas las iniciativas que contribuyan a defender un sector estratégico para nuestro territorio.
A nivel municipal estamos impulsando acciones para poner en valor la citricultura local. La Fira de la Taronja es, todos los domingos de octubre a mayo, el mejor escaparate para los cítricos de Castelló y una oportunidad para que los castellonenses respalden la fruta recogida en nuestros campos. Consumir producto de kilómetro 0 es la mejor respuesta y el mayor apoyo social para ayudar a mantener y generar centenares de empleos en nuestra ciudad.
No ha sido la única medida adoptada desde el Ayuntamiento de Castelló. También hemos rebajado el IBI rústico y hemos apoyado las movilizaciones para instar a la aplicación de la cláusula de salvaguarda en el acuerdo de la UE con Sudáfrica.
La citricultura no solo es un sector económico clave en las comarcas de La Plana, también tiene un claro valor social, medioambiental y paisajístico en nuestras ciudades. El abandono de huertos por las falsas expectativas de la burbuja inmobiliaria generó un problema añadido a las dificultades que afrontaba el sector. Los agricultores no necesitan luchas partidistas sino un frente común que recupere el valor estratégico de la citricultura en nuestro modelo económico. Ganaremos todos.
*Concejal de Sostenibilidad y edil socialista Ayuntamiento Castelló
