Querido lector:

El Gobierno valenciano pretende aprobar un decreto este próximo viernes que en la práctica le permitiría controlar el presupuesto de las diputaciones de Alicante, Valencia y Castellón en materia turística y deportiva, aunque vestido de colaboración institucional y de eficiencia en la aplicación de los recursos públicos para evitar duplicidades.

Desde luego, la evitación de duplicidades se puede lograr con colaboración institucional normalizada sin que por decreto, de legalidad muy cuestionable, una institución de mayor rango interfiera en el presupuesto de la otra sin poseer ascendencia administrativa sobre ella al no haberse desarrollado el reglamento estatutario correspondiente.

A las claras se trata de un asunto económico ya que la Generalitat quiere suplir un presupuesto que no tiene con el de las diputaciones, pero también de calado político que va mucho más allá de la estrategia elaborada por el Consell en relación al programa Xarxa Llibres (que al final de la polémica acabó en colaboración presupuestaria entre las diferentes administraciones) o de los programas antimosquitos por las graves plagas detectadas en Castellón en los últimos años (que también discurren por el cauce de la coordinación institucional aunque con problemas presupuestarios).

Y va más allá por varias razones. Porque entra de lleno en las capacidades competenciales de cada institución y provincia (en Alicante además del PP es el propio PSPV provincial el que se ha rebelado contra la disposición del Consell de Puig); porque da en la llaga de la batalla política entre PP (que gobierna las diputaciones de Alicante y Castellón) y las fuerzas de la izquierda (Generalitat) y porque se sitúa en el contexto de la eterna dialéctica de la supresión de las diputaciones propugnada por la izquierda.

Y es además una batalla política por el impacto de las dos áreas a controlar, la de más influencia empresarial (en Alicante el sector turístico se ha levantado en armas y el de Castellón sin duda lo hará) y social a raíz de las sensibles líneas de financiación de entidades deportivas.