La ministra de Política Territorial, Meritxell Batet, lanza una serie de iniciativas para dialogar con la Generalitat. Además de la reforma de la Constitución, que será difícil con el PP en la oposición y el ya anunciado rechazo de Ciudadanos, Batet asegura que el Gobierno de Pedro Sánchez está dispuesto a negociar sobre 45 de los 46 puntos que el expresident Puigdemont presentó al Gobierno de Rajoy y que tratan de inversiones, infraestructuras y otras cuestiones. El único punto innegociable es el 46, que se refiere al referéndum de autodeterminación. La ministra es tajante al afirmar que una cuestión tan capital como la de la independencia no se puede decidir a cara o cruz, en un desempate, sino que es obligación de las fuerzas políticas lograr un amplio acuerdo que represente a la mayoría de los catalanes y ratificarlo después. En este sentido, el president Torra no se ha movido de su posición de priorizar el referéndum, pese a que repite que está dispuesto a negociar sin condiciones. Las posturas están, pues, muy alejadas en aspectos fundamentales, pero es importante que se abran vías de diálogo.

Para ello, recuerda Batet, sería significativo que la Generalitat acudiera a la comisión de reforma constitucional y a la de la financiación autonómica. El PDECat ha mostrado ya su disposición a asistir, pero desconocemos si Torra respalda esa posición por lo que debería aclararlo para que la Generalitat, como reclama Batet, no deje de representar a los catalanes y trasladar sus demandas en los órganos multilaterales del Estado.